De bobo, tonto o mentecato no tiene nada cuando se trata de cavar hoyos financieros al estilo morenovallista o engañar a la gente con programas de seguridad pública y su famoso plan de bacheo que han sido un fracaso.
Puebla capital vive entre el miedo por la inseguridad, los baches, privatizaciones de servicios públicos, basura y el dispendio de recursos públicos.
Habrá que ver lo que arrojan las cuentas públicas de “Lelo” Rivera.
Asimismo, aparte de dar a conocer personalmente los números de Massive Caller, encuestadora robotizada de cabecera del PRI, PAN y PRD, que gusta de manipular números tratando de engañar al electorado con la falsedad de que existe un empate técnico con el candidato de Juntos Haremos Historia, Alejandro Armenta, tendrá que responder Rivera por actos anticipados de campaña que constituyen una violación flagrante a la ley electoral.
Además, los poblanos tienen que exigirle a “Lelo” Rivera Pérez que explique la negociación que hubo en 2018 entre Rafael Moreno Valle Rosas y Marko Cortés, para que quedara anulada su inhabilitación por 12 años para ejercer cargos públicos y la multa de 25.5 millones de pesos por irregularidades detectadas en su cuenta pública de 2013, cuando era presidente municipal de Puebla capital.
El dictamen que lo condenaba fue aprobado con 32 votos por el Congreso local, por 3 en contra y 2 abstenciones, luego de la investigación que realizó la Auditoría Superior del Estado.
La revisión de la ASE a sus cuentas públicas en 2016, detectó irregularidades por 411.6 millones de pesos, iniciando el proceso administrativo, pues Rivera solo pudo comprobar el gasto legal de 123.6 millones. Fue claro el daño patrimonial.
¿Qué pasó después?
“Lelo”, se dijo perseguido del morenovallismo, pero no fue así, porque siempre sirvió de tapete a Rafael Moreno Valle Rosas, Antonio Gali Fayad y Martha Erika Alonso Hidalgo. Si esto no bastara, el trueque para ser perdonado consistió en que el nieto del general diera su apoyo con anticipación a Marko Cortés, quien competía por la dirigencia nacional del PAN, a cambio de que el exgobernador fuera senador y coordinador de la bancada panista; Martha Erika, la candidata al gobierno que, finalmente, ganó a Miguel Barbosa Huerta; retirar acusaciones a Eduardo Rivera, con el agregado de hacerlo candidato a la alcaldía, que perdió con Claudia Rivera Vivanco.
Si Moreno Valle Rosas odiaba a “Lelo”, lo hubiera aplastado a pesar de su pragmatismo, en lugar de apoyar su candidatura.
Por el contrario, “Lelo” Rivera le está agradecido a uno de los peores gobernadores que ha tenido Puebla, por eso arrancará su campaña en la Plaza de La Libertad, construida exprofeso por Rafael en el cerro de Loreto para las celebraciones de sus triunfos políticos; tampoco tendría un equipo inundado de morenovallistas, incluyendo a la gente de Ignacio Mier Velazco.
Hoy, confía “Lelo” Rivera en el dañino morenovallismo y, quizá, también tenga de su lado en espíritu al que fuera Arzobispo de Puebla de 1950 a 1975, el tlaxcalteca Octaviano Márquez y Toriz, quien el 15 de mayo de 1961 lanzó la Quinta Carta Pastoral contra el Comunismo, festinando en su interior la masacre de universitarios de la UAP en San Miguel Canoa; como también sonreía cuando grupos de jóvenes fascistas a su servicio cometían actos terroristas, hecho que investigó el periodista Manuel Buendía, señalando contundente: “Son las matonas ovejitas del angelical pastor”, quedando registrado en los libros compilatorios “Pensamiento y Acción de la Derecha Poblana y la Santa Madre”.
Es la ultraderecha a la que pertenece Eduardo Rivera Pérez y su organización “secreta” “El Yunque”. De ahí salieron los halcones de Márquez y Toriz que, posiblemente, tuvieron que ver con el asesinato de los universitarios Joel Arriaga y Enrique Cabrera.
¿Qué tanto aprendió “Lelo” Rivera del legado del quinto Arzobispo de Puebla y de Manuel Díaz Cid, maestro de la UPAEP y considerado uno de tantos alimentadores del Frente Universitario Anticomunista?
POSDATA: La denuncia por asociación delictuosa, abuso de autoridad o incumplimiento de un deber legal y peculado, le fue perdonada a José Juan Espinosa Torres, ex alcalde de San Pedro Cholula.
¿Alguien duda que la justicia es ciega y por eso se extravía?
POSDATA 2: Las circunstancias de la elección del 2 de junio serán totalmente diferentes en Puebla.
Ganará de manera contundente Alejandro Armenta al fascista Eduardo Rivera Pérez.
POSDATA 3: Arranca Armenta su campaña en Izúcar, Puebla capital y San Pedro Cholula.
Rivera, lo hará en la Plaza de La Victoria del cerro de Loreto.
POSDATA 4: Bajaron a Santiago Nieto de la candidatura al senado por Querétaro. Los poblanos preguntan al tribunal electoral: ¿Y Néstor Camarillo, ‘apá?
POSDATA 5: Se resquebrajan los cimientos del PAN y los famélicos PRI y PRD, al renunciar regidores a sus partidos e incorporarse a Morena y al proyecto certero de Alejandro Armenta.
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REFLEXIONES
Periodismo con Historia
(ABC Puebla)
